No es la adecuada forma de trabajar ni la más profesional, pero suele ocurrir que cuando uno más presume de algo suele ser de lo que carezca. En la FAF, los seleccionadores de la sub 16 y sub 18 han sido grandes jugadores, todos conocemos a Carlitos (ese gran deleantero del Sevilla ) o Diego Tristán (del superdepor).
La Federación Andaluza cuando se hizo esta temporada con sus servicios seguro que buscaron que estas dos personas pusieran todos sus conocimientos y capacidades al servicio de formar futbolistas de élite. Pero resulta que estas dos personas están desprestigiando la profesión de entrenador, el escándalo salta cuando veo la convocatoria de la sub-18 y veo que hay un jugador convocado del Juvenil B de Apedem Montilla, del cual me alegro enormemente que un paisano vaya, pero creo que sin ver un jugador y conociendo el nivel de la misma, lo que se ha premiado ha sido otros intereses antes que los futbolisticos y el bien del fútbol andaluz.
Bueno, espero que el chaval lo disfrute y tenga suerte, pero trabajando así no creo que sea el camino a seguir.
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